Ensaladas uzbekas: un tesoro de vitaminas

Cada región de Uzbekistán es un lugar único, una tierra única con una naturaleza maravillosa y pura. La fértil tierra uzbeka, gracias a los esfuerzos y cuidados esmerados de los dehkans uzbekos, proporciona inimaginables cultivos de raíces, con los que se pueden preparar las más deliciosas y saludables ensaladas.

La variedad de verduras en Uzbekistán es asombrosa. Pero quizá la más preferida y conocida por todos sea la tradicional ensalada de tomates y cebollas, a la que se añade también una vaina de pimientos dulces y amargos. En Uzbekistán, esta ensalada se llama Achchik Chuchuk. Quizá piense: "Y qué tiene de especial esta ensalada? Pero créame, no probará unos tomates tan deliciosos en ningún otro sitio. Eso es porque es preferible hacer una ensalada con tomates de la variedad Yusupov.

Los tomates Yusupov son una auténtica delicia y un festín en el dastarkhan uzbeko. Imagínese, un tomate grande, rosa o rojo, de sabor dulce y carnoso, y el peso de un fruto así puede alcanzar los 800 gramos. - No es un milagro? La variedad fue criada por el fitomejorador uzbeko Karim Yusupov y ya se ha convertido en una leyenda. La ensalada Achchik Chuchuk es mejor como plato frío y servido con pilaf o kebab caliente.

Durante la temporada de frío en Uzbekistán, las ensaladas de rábano Margilan son las favoritas. Una de las ensaladas más populares es la ensalada de rábanos con semillas de granada o Anor va turp salati. Para la ensalada, se corta el rábano en tiras finas y se añaden los granos de granada. El resultado es una ensalada con una agradable acidez y un poco de acidez de granada. Esta ensalada es un verdadero tesoro de vitaminas y microelementos útiles.

A principios de la primavera, en Uzbekistán les gusta preparar una ensalada de rábanos y huevos: Radish va tukhum salati. Por regla general, se utiliza la variedad búlgara de rábano, de color rojo rosado, y la variedad Mayskaya también es excelente para la ensalada. El resultado es una ensalada compuesta por pequeños trozos de rábano y huevos, espolvoreada con hierbas y aderezada con crema agria.

Otra ensalada vitaminada es la Karam va kalampir salati, una ensalada hecha con col y pimientos. Una mezcla de coles y pimientos picados, rociados con aceite, se convierte en una gran opción como acompañamiento de un plato principal.

Por supuesto, estas no son todas las ensaladas que hay que probar en Uzbekistán. Aparentemente sencillas, las ensaladas tienen un sabor y un aroma propios. Y es que las verduras en Uzbekistán son productos ecológicamente puros. Gracias al clima, la composición del suelo y el agua, las frutas son tan ricas y deliciosas. En Uzbekistán también existe una antigua cultura de consumo de especias. Al añadir especias y hierbas, las sustancias aromáticas aumentan el apetito y hacen que los platos sean muy apetecibles.

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